martes, 3 de julio de 2007

Destinatarios vacíos!

“la cultura juvenil, como cultura universal y tribal al mismo tiempo, se construye en el marco de una institución, tradicionalmente consagrada a los jóvenes, que esta en crisis: la escuela, que se ha debilitado tanto por la quiebra de las autoridades tradicionales como por la conversión de los medios masivos en espacio de una abundancia simbólica que la escuela no ofrece”
Beatriz Sarlo. “Escenas de la vida Post-Moderna”

Desde esta institución tradicionalmente consagrada a los jóvenes, debilitada por la conversión de los medios masivos en la época postmoderna y la globalización, no se espera menos q ver reflejados los cambios sociales en los adolescentes.
Son estos jóvenes los que resultan un desafío constantemente cambiante para esta institución, junto con los padres.

Es notoria la influencia que los medios masivos de comunicación ejercen en los jóvenes. En varios aspectos los podemos comprobar: el mínimo que pasan frente a la TV es de 3 horas diarias. ¿Qué tipos de programas ven? ¿Cuánto lo instruyen estos programas y en que contenido? ¿Cuan aprovechable es que miren estos programas?
No hace mucho fui a un campamento en el que coordinaríamos alrededor de 70 chicos de 10 años. Las actividades permitían medianamente que tuvieran tiempos de esparcimiento en los q ellos eligieran las actividades q realizar.
Me llamo poderosamente la atención como todas las nenas se pusieron a bailar las canciones de una novela actual, muy de moda entre las chicas de esa edad.
Todas sabían las letras de las canciones, la historia completa y los pasos de baile y con el más mínimo detalle.
Hasta aquí, dentro de todo estaban encausadas, ¿quien de nosotras mujeres no bailo nunca en su vida disfrazada de su cantante favorita?
El último día toco juntarse por cursos y debatir.
Surgieron varios problemitas y las actitudes y posturas de las nenas eran, no se si coincidentemente similares a las de las protagonistas de la novela en cuestión.
Esto me sorprendió aun más y me despertó la curiosidad de mirar una vez mas la novela, q había visto varias veces antes, pero estas ves con una visión crítica.
Lamento no encontrar personajes cargados de valores y aptitudes aplicables a la vida.
Se convierte todo en un espectáculo mediático en que se juegan y manipulan los sentimientos y las vidas de las personas.
Personajes carentes de valores, y que basados en el dinero pasan toda la vida preocupados por temas totalmente fuera de la realidad.
Un programa lleno de sucesiones de imágenes sin conexión, sin sentido que giran entorno a los intereses personales de algunos protagonistas.
Tiene un guión fácil de entender y fácil de adivinar el final.
Los personajes so sumamente extravagantes pocos bien logrados en cuanto actuación.

Así, con este tipo de ejemplos están creciendo estos niños, y lamentablemente lo viven lo pasan a sus vidas propias y construyen su identidad en esto.
Coincido con muchos autores en que la vida en la sociedad actual implica masificarse muchas veces, nos afecta a todos y todo influye en cada persona.

Beatriz Sarlo en su libro “Escenas de la Vida Post-Moderna” cuando habla de los jóvenes habla de un disfraz que ellos usan, de un rito que ellos viven.
Un rito y un traje que responden a un pensamiento, a una ideología, a la rebeldía propia de la edad y ala contradicción de querer encajar en un grupo y a la vez diferenciarse, ser ellos mismos, encontrar su lugar en el mundo.
Por mi propia experiencia adolescente, que a un no ha acabado, respecto a esta búsqueda solo puedo decir que no se encuentran grandes respuestas afuera, si no adentro, hay q encajar bien en el mundo interno que cada uno tiene para poder enfrentar al mundo externo que un millón de veces nos va a exigir mas cosas de las que realmente necesitamos. Nos va a crear mas necesidades y preocupaciones de las q realmente necesitamos satisfacer.
Pero esto no solo pasa con los adolescentes, muchos adultos caen en esta trampa.
Todos vivimos constantemente con estos disfraces y estos ritos que se vuelven rutina con el pasote los años.
Xavier Guix en su libro “Ni me explico, ni Me Entiendes” habla de la comunicación, y en su capitulo segunda subtitula: “Juegos Roles y Baile de Macaras”. Allí habla de lo difícil que se hace equilibrar nuestra persona, nuestra función y papel en la sociedad.
Dice q termina por convertirse en un juego de roles a través de los cuales nos relacionamos y vivimos, y lo compara con un baile de mascaras en el que nadie sabe realmente quien se oculta detrás.
Entonces tenemos personas y personajes.
Ahora el interrogante se amplia: ¿los medios de comunicación, sus contenidos influencian nuestra vida?
A pesar de que la respuesta parezca lógicamente un SI, muchas veces nos resistimos a darnos cuenta. Y si nos damos cuenta, entonces ¿Por que los medios de comunicación influencian nuestras vidas?
Gregorio Iriarte en “Post-modernidad, neoliberalismo y globalización” dice que
“…los medios de comunicación se han convertido en espacios claves de construcción de la agenda publica y legitimación de corrientes de opinión de la sociedad.”
Y tal vez un poco mas.
“…es necesario advertir que si bien los medios de comunicación son espacios de mediación cultural y social se sostienen en estructuras político-económicas que responden a intereses de poder…”
Tal vez los cambios que han sufrido nuestras culturas, nos dejaron vacíos, y propensos a absorber cuanta información nos parezca necesaria para enfrentar nuestras vidas.
“En este contexto los medios nos plantean una realidad cultural nueva… ”
“……pone en juego el modo como se construyen hoy las identidades culturales…”
(G. Iriarte.)

Se entrecruzan ideologías, políticas, sociales, económicas. Los medios de comunicación venden y nosotros destinatarios vacíos, con actitud adolescente solo consumimos. Entonces recuerdo una definición de Beatriz Sarlo en su libro anteriormente nombrado: “la juventud no es una edad si no una estética de la vida cotidiana”
Y coincidiendo con su idea retomo:
“El mercado… corteja ala juventud después de haberla instituido como protagonista de la mayoría de sus mitos. La curva donde se cruzan la influencia hegemónica del mercado y el peso descendente de la escuela representa bien una tendencia: los jóvenes pasan de la novela familiar de una infancia cada vez mas breve al folletín hiper realista que pone en escena la danza de las mercancías frente a los que pueden pagárselas y también frente a esos otros consumidores imaginarios…”

Tengamos cuidado de formar fuertes los valores que deseamos en nuestros hijos, luego de fortalecernos nosotros.
Que no seamos “destinatarios vacíos”, que las ofertas nos encuentres siempre llenos y firmes en un pensamiento y un estilo de vida critico de la gran cantidad de posibilidades q se nos facilitan en el día a día.

Rivarola Gabriela Anahí.
Fsa. 1º de Julio de 2007

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